Final de Julio, mes canicular, la draga sigue su trabajo, un bonito espectáculo.
Solo sirve para que cuando el sol no aprieta, algunos jubilados maten el tiempo haciendo el "seta". (Sociedad de Espectadores de Trabajos Ajenos)
Aún no se habrá terminado el trabajo que el primer levante pre-otoñal se habrá llevado lo que de forma antinatural se quiere robar al mar.
La arena blanca y limpia ya no existe, los puertos deportivos barran el paso a las corrientes naturales. Todo el fondo marino adios...
La arena se acumula desproporcionada en las bocanas de los puertos, mientras que en playas como la de Cabrera y Vilassar desaparece.
De cualquier forma recuerdo que no siempre había el mismo tamaño de playa, ha ido variado de año a otro, pero siempre de forma natural se volvía la arena o se la llevaba el mar para lavarla.